La vicepresidenta de Argentina, Victoria Villarruel, criticó este viernes los acuerdos que el Gobierno del presidente Javier Milei anunció esta semana con el Reino Unido sobre las islas Malvinas ―Falkland, en inglés―, un archipiélago por el que ambos países sostuvieron una guerra en 1982 y sobre el cual reclaman soberanía.
Villarruel publicó en su cuenta de X un mensaje en el que descalificó los puntos que la canciller argentina, Diana Mondino, y su par británico, David Lammy, acordaron este martes en Nueva York, donde se reunieron en el contexto de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas.
Según un comunicado de la cancillería de Argentina, el acuerdo entre ambos funcionarios incluye retomar las negociaciones de un Plan Proyecto Humanitario con la Cruz Roja Internacional, organizar un viaje para que familiares de soldados fallecidos durante la Guerra de las Malvinas puedan visitar sus tumbas, conservación de pesquerías y reanudar el vuelo entre Sao Paulo, Brasil, y las islas, que una vez al mes hacía una escala en Córdoba, Argentina.
Un día después del encuentro, Mondino defendió lo acordado, que en su cuenta de X calificó como “noticias muy positivas”. “Tal como dice nuestra Constitución: la nación argentina ratifica su legítima e imprescriptible soberanía sobre las islas Malvinas”, dijo.
Por su parte, Villarruel descalificó la propuesta, que en su mensaje de este viernes tachó de “contraria a los intereses de nuestra nación”.
“¿Nos toman por tontos? Ellos obtienen ventajas materiales, concretas e inmediatas, mientras que a nosotros nos ofrecen migajas como consuelo emotivo y debilitan nuestra posibilidad de negociación”, dijo la vicepresidenta.
“Resulta insólito que mientras los EE.UU. nos ofrecen buques guardacostas para proteger nuestro mar argentino del pillaje extracontinental, nosotros propongamos cooperar con la potencia que usurpa nuestro territorio”, agregó.
En su publicación, Villarruel asegura que “estas no son palabras contra nuestro gobierno”, aunque dice que es “inevitable” pronunciarse sobre el asunto “ya que es un tema que toca cada fibra de mi identidad y pone en juego los intereses permanentes de nuestra gran nación”.
La Guerra de las Malvinas —en la que murieron 649 soldados argentinos y 255 británicos— terminó el 14 de junio de 1982 con una victoria británica. Actualmente, el archipiélago tiene un gobierno propio y es administrado como un territorio británico de ultramar, aunque Argentina sostiene que le pertenece.
Este conflicto armado es un nuevo motivo de diferendo entre el Gobierno de Milei y la vicepresidenta Villarruel, cuyas tensiones han quedado expuestas en varias ocasiones desde que el presidente asumió el cargo el 10 de diciembre.
