Desde este lunes 31 de marzo, las dietas de los senadores nacionales quedaron descongeladas tras el vencimiento de la resolución firmada por Victoria Villarruel. Con la paritaria de los trabajadores legislativos prevista para abril, los ingresos de los senadores podrían superar los $9 millones, ya que sus sueldos volverán a estar atados a los aumentos de los empleados del Congreso.
Uno de los primeros en rechazar este incremento fue el senador Luis Juez, quien le envió una nota a la vicepresidenta argumentando que “no son momentos para discutir los salarios de la política”. En su escrito, el legislador del PRO solicitó expresamente que su dieta se mantenga congelada durante todo el año. Más tarde, los senadores de Santa Cruz, José María Carambia y Natalia Gadano, también manifestaron su oposición.
Sin embargo, aún no hay una postura unificada dentro del Senado. Desde la oficina de la presidencia del cuerpo legislativo, en el primer piso del Palacio, aseguraron que Villarruel no volverá a firmar una resolución para congelar sueldos como hizo en diciembre. “Lo deben resolver los senadores en el recinto”, señalaron fuentes cercanas a la vicepresidenta.